En la ciudad de Juchitán, Oaxaca, los trabajadores, estudiantes, mayores, jóvenes, transportistas y automovilistas enfrentan un problema diario debido a las obras de modernización de la Línea K del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT). A 14 meses de haber iniciado el proyecto en la zona urbana, los problemas con la vialidad continúan, especialmente durante las “horas pico”, cuando se cierran varios cruces sobre las vías del ferrocarril.
Esto ha generado molestia entre los automovilistas y prestadores de servicios de taxis y mototaxis, quienes deben buscar alternativas para cruzar sin “atascarse”. Las autoridades juchitecas han tomado medidas para abordar este problema. Según el director de Obras del gobierno de la ciudad, José Antonio Sánchez, las autoridades le han exhortado a la empresa encargada de la obra para que agilice los trabajos, ya que han dado fechas de terminación, pero estas no se están cumpliendo.
En este sentido, Sánchez reveló que cruces importantes en el periférico norte de la ciudad ya han sido terminados, pero algunos de ellos aún no han sido reabiertos a la circulación. Por ejemplo, la prolongación 2 de Abril, que conduce al campo municipal de béisbol, y la calle Reforma, también serán cerradas a la circulación. Además, el paso habilitado bajo el puente de la carretera federal será cerrado temporalmente debido a su estrecha amplitud, lo que podría representar un peligro cuando el tren ya esté operando.
La situación ha generado frustración entre los ciudadanos, quienes solicitan que se restablezcan los cruces y se mantengan las condiciones actuales. El director de Obras resaltó la importancia de agilizar los trabajos para evitar problemas de movilidad en el futuro.
