El Senado de México ha manifestado su inquietud ante la Cámara de Representantes de Estados Unidos con respecto a una propuesta legislativa que contempla la imposición de un impuesto del 5% a las remesas enviadas desde el país vecino. La iniciativa, conocida como “The One, Big, Beautiful Bill” y promovida por el congresista republicano Jason Smith, ha generado debate y controversia en ambos lados de la frontera.
La Junta de Coordinación Política, la Mesa Directiva y los coordinadores de los diferentes grupos parlamentarios representados en el Senado mexicano han emitido una declaración conjunta en la que califican la medida como potencialmente perjudicial para las economías de México y Estados Unidos. Argumentan que la imposición de un gravamen a las remesas podría ser contraproducente y contraria a los principios de libre comercio que sustentan los acuerdos bilaterales entre ambas naciones. La declaración insta a una reflexión profunda sobre las posibles consecuencias negativas de la propuesta.
El senador Antonino Morales Toledo, representante del estado de Oaxaca, ha expresado su preocupación por el impacto que la medida podría tener en la economía de su estado y del país en general. Advierte sobre el riesgo de que la imposición del impuesto impulse el uso de canales informales para el envío de remesas, lo que podría generar problemas de lavado de dinero y aumentar la vulnerabilidad del sistema financiero. El senador Morales Toledo ha enfatizado que los trabajadores migrantes ya contribuyen al fisco estadounidense a través del pago de impuestos y comisiones por el envío de dinero a sus familias.
El senador ha advertido de que esta medida podría ser interpretada como discriminatoria, ya que afectaría principalmente a ciudadanos extranjeros, incluyendo aquellos con estatus migratorio irregular, limitando su acceso a beneficios fiscales y programas de asistencia social. En caso de aprobarse, el gobierno del estado de Oaxaca se está preparando para implementar medidas que mitiguen el impacto económico en las familias oaxaqueñas.
Según datos disponibles, en los primeros dos meses de 2025, el estado de Oaxaca recibió 9,119 millones de dólares en remesas, lo que representa un ligero incremento del 0.6% en comparación con los 9,068 millones de dólares recibidos en el mismo periodo de 2024. Este flujo de remesas es de suma importancia para la economía del estado, y cualquier medida que pueda afectar su estabilidad genera preocupación en las autoridades locales.
